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Stop Luciernagas ATENCIÓN: ESTE ARTÍCULO PUEDE CONTENER SPOILERS. Stop Luciernagas


El Gordinflón es la cuarta etapa de los Infectados ubicados en climas secos.

A medida que los individuos evolucionan a gordinflones, su visión se deteriora aún más y su velocidad se reduce considerablemente. Su fuerza, similar a la de un tanque, aumenta de manera significativa, y los bultos orgánicos sobre el cuerpo les sirven como una armadura que puede desprenderse y usarse como proyectil para esparcir esporas.[1]

Información[]

Los Gordinflones son una variación de la cuarta etapa que se desarrolla en climas secos, tardando años en llegar a esta etapa. Están cubiertos de hongos gruesos que lo blindan ante la mayoría de ataques. Debido a esta cubierta protectora, pueden soportar múltiples impactos de armas como la escopeta y el rifle de caza, e incluso hachas y machetes que los hacen extremadamente difíciles de eliminar. Los Gordinflónes son extremadamente agresivos, pero se mueven lentamente, haciéndolos más predecibles que otros infectados. Al igual que los Chasqueadores, los Gordinflones 'ven' a través del uso de la ecolocalización para localizar y atrapar a un sobreviviente. Debido a que el hongo ha deformado completamente su cara y los ha cegado, su ecolocalización es mucho menos refinada que los Chasqueadores. Si un 'Gordinflón agarra a un superviviente, rasgará violentamente su mandíbula a través de la fuerza bruta, o agarrará la cabeza del jugador y lo aplastará, matándolos instantáneamente. No hay forma de que el jugador se defienda si lo agarran, el resultado es una muerte instantánea. Los Gordinflones arrojan sacos de micotoxinas, que explotan al impactar, rociando al objetivo con la toxina. La micotoxina dañará al jugador con el tiempo, por lo que se recomienda evitar estas nubes mortales.

Los 'Gordinflones, al igual que todos los Infectados, son vulnerables al fuego. Cuando se incendian, un Gordinflón se agita violentamente, tratando de apagar las llamas. Después de ser inmolados, estarán carbonizados, negros y fumando. Su armadura también estará chamuscada y quebradiza, haciéndolos vulnerables a las armas de poca potencia. A pesar de esta debilidad, las armas basadas en fuego como lanzallamas o cócteles Molotov aún requieren múltiples usos antes de matar a un Gordinflón. Su otra debilidad, menos efectiva, son los disparos de blindaje de un arma mejorada, como el rifle de caza. Se necesitarán menos disparos para matar si el arma tiene las mejoras de poder y perforación de armadura. Teniendo en cuenta la velocidad a la que crece el Cordyceps después de que su cuerpo fructífero ha emergido de la cabeza de los huéspedes, se estima que los infectados tardan de 10 a 15 años en llegar a la etapa 4.

Los Gordinflones se encuentran en los siguientes cinco lugares en The Last of Us:

  • 1 en el gimnasio de la Escuela en Lincoln. (Debe combatirse)
  • 1 en el sótano del Hotel Grand en Pittsburgh (Se puede evitar, no aparece en el modo fácil)
  • 1 en los dormitorios de la Universidad de Eastern Colorado. (Puede evitarse, suelta un Colgante de Luciérnagas si se le mata)
  • 1 en el molino durante el invierno en el Complejo Lakeside . (Debe combatirse)
  • 3 en el túnel subterráneo en Salt Lake City. (Se pueden evitar)

En The Last of Us Parte II se encuentran en 2 ocaciones como jefes:

Estrategia[]

La forma más eficiente de matar a los Gordinflones es arrojarles un Cóctel Molotov o usar el Lanzallamas contra ellos, debido a su vulnerabilidad al fuego. Cuando estén aturdidos, la escopeta es el mejor arma para rematarlos para ahorrar suministros y munición. Sin embargo, un Gordinflón quemado y debilitado puede agarrar a Joel y ejecutarlo, por lo que bajo ninguna circunstancia debe permitirse que se acerque al jugador. Para contrarrestar esto, dos disparos de un El Diablo mejorado son también suficientes para matarlo.

Otra forma eficaza de matar a los Gordinflones es lanzarles un Cóctel Molotov y usar una Bomba de Clavos mientras están en llamas. Sin embargo, es necesario guardar las distancias hasta que muera, ya que siempre se cargará contra el jugador.

El Gordinflón extrae las bombas de micotoxinas de parches brillantes y deformados que le crecen en el cuerpo. Cada Gordinflón tiene tres: una en el abdomen inferior derecho, una en el pecho superior izquierdo y una en la parte superior derecha de la espalda. Disparar cualquiera de estos crecimientos los destruye y reduce el daño requerido para matar al Gordinflón. Destruir los tres desactivará completamente el ataque a distancia del Gordinflón, limitándolo a cargar contra el jugador. Esto aumenta significativamente las opciones del jugador para lidiar con el Gordinflón, ya que ya no puede dañar al jugador desde lejos y es fácil tenderle trampas. Si no pueden destruirlos, el Gordinflón tardará un poco en arrojar el saco de hongos; cuando levante los brazos el jugador tendrá que alejarse de la dirección en la que el Gordinflón apunte.

En el caso de los Corredores, Acechadores o Chasqueadores, si el jugador tiene un ladrillo o una botella vacía, así como un arma contundente, puede aturdirles arrojándoles el objeto y correr hacia ellos. golpeándolos con un arma cuerpo a cuerpo y matándolos de inmediato. Sin embargo, esta táctica es inútil contra un Gordinflón, ya que su cara endurecida resiste a los ladrillos / botellas arrojadas y, quedarse quieto puede invitarlo a lanzar una bomba de hongo al jugador o acercarse para matarlo.

En el primer encuentro, ya que el jugador carecerá del Lanzallamas, la escopeta es la mejor alternativa. Correr en diferentes direcciones, detenerse y disparar una vez es un proceso tedioso, pero acaba funcionando después de muchos disparos. Si se queda sin munición para la escopeta, puede cambiar rápidamente al rifle de caza. Tmbién es viable en las dificultades más altas, ya que es mejor evitar a los enemigos por completo para conservar la munición o en el caso de haberse quedado sin cócteles molotov y bombas de clavos. A pesar de que los Gordinflones se mueven lentamente, aún pueden cargar cuando saben que el jugador está cerca, por lo que se recomienda evitar arrinconarse cuando se evita una traba de Gordinflones; la conciencia especial es clave para evitar quedar atrapado.

Apariencia[]

Son enormes y como su nombre lo indica parecen gordos. Al igual que los chasqueadores no pueden ver, y a veces se quedan en un lugar como estáticos. Son muy resistentes a las armas de fuego haciendo que en el intento de matarlo se pierda valiosa munición. Siempre aparecerán junto con otros infectados.

Curiosidades[]

  • A pesar de que la infección sucedió hace veinte años y a los Gordinflones tardan de dos a cuatro años en desarrollarse, el planeta debería estar repleto de ellos y serían el infectado más común.
  • No se les puede matar de manera sigilosa.
  • Al parecer, los Caníbales nunca se habían encontrado con ese tipo de infectado, porque David, su líder, no sabía nada sobre ellos.
  • Los Gordinflones siempre están rodeados de otros infectados, tal vez porque las esporas que emanan los atrae.
  • Después de un tiempo, los Gordinflones se sientan en una esquina y se convierten en la última fase de la infección: una formación de hongos completamente desarrollada cuya función es la de emitir esporas. Puede que esta sea la razón por la que no haya tantos.
  • Las esporas que arrojan parece polen (cosa curiosa, ya que son hongos y no flores).
  • Las esporas que arrojan son tan potentes que incluso pueden dañar a Ellie, la única persona inmune a las esporas de los Tocones.
  • Los Gordinflones son la única variante que no aparece en el DLC Left Behind.

Galería[]

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